Una de las noticias con más actualidad en la prensa sensacionalista, y especialmente en los diarios ingleses, es la unión matrimonial entre el príncipe Guillermo de Inglarerra y Catherine Middleton. Se encuentran en la recta final de los preparativos nupciales, ya que el día 29 de abril ha sido escogido como fecha para este enlace. Se celebrará en la abadía de Westminster con una emotiva ceremonia religiosa, oficiada por el deán de Westminster, en la que el arzobispo de Canterbury se encargará del rito del matrimonio, mientras que el obispo de Londres pronunciará el discurso. Una vez convertidos en marido y mujer, la pareja regresará al palacio de Buckingham en un cortejo que recorrerá la plaza del Parlamento, Whitehall, Horse Guards Parade y The Mall. A su llegada a palacio, la Reina ofrecerá una recepción para los recién casados y sus invitados, representantes de la vida oficial y privada de la pareja. El Príncipe de Gales ofrecerá una cena privada, seguida de baile, también en Buckingham por la noche, para la pareja, sus familiares y sus amigos más cercanos (la lista oficial de invitados probablemente se hará pública días antes del enlace). Las nupcias de Guillermo de Inglaterra y Catherine Middleton han despertado tal expectación que las reservas de vuelo a Londres han aumentado un 40 por ciento y muchos hoteles de la ciudad están reservados para esa semana.
El 29 de abril, nada escapará al ojo público por lo que todo debe ser perfecto. Así que, desde que el compromiso matrimonial se anunciara el 16 de noviembre, ambos han estado viajando del norte de Gales, donde la pareja instaló su nuevo hogar hace ya más de medio año para que el Príncipe pueda seguir atendiendo los próximos años sus obligaciones en el Ejército, a Londres, escenario del enlace y sede de Palacio, con el fin de organizar en persona su boda.
El príncipe Guillermo y Catherine Middleton están al frente de las principales cuestiones nupciales. "Hay mucho que decidir, pero están al timón de todo lo importante", declaró una fuente real. No conoceremos hasta el último momento detalles como el diseño del vestido de novia, el velo y los zapatos que la futura princesa lucirá el gran día o el uniforme de gala que el príncipe llevará en el acontecimiento. Aunque nadie se resiste a hacer sus conjeturas. Los más consideran que la prometida se decantará por Bruce Oldfield, el diseñador favorito de la princesa Diana, y que el heredero del Heredero elegirá el traje de las Fuerzas Aéreas Británicas o el de la Caballería de la casa, a la que sirvió anteriormente como teniente. El título que los novios adquirirán tras su matrimonio es otra de las incógnitas que tendrán respuesta tras el sí, quiero.
Antecedentes
Futuro próximo
P.C.L
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